Xalapa, Ver. - El sol del mediodía caía quemante sobre la Plaza Lerdo, en Xalapa, donde miles de simpatizantes de Morena se reunieron para presenciar un hecho histórico: la toma de protesta de la primera Gobernadora del Estado de Veracruz, Rocío Nahle.

Desde tempranas horas, trabajadores de distintos sindicatos y militantes llegaron en autobuses, organizados en grupos, para ser testigos de un evento que, para muchos, marcaba el inicio de un cambio esperado.

Mientras los asistentes se cubrían del fuerte sol con sombrillas, el ambiente vibraba al ritmo de la música tradicional, en un momento los líderes de los 13 pueblos originarios y afromexicanos comenzaron un ritual ancestral para recibir a Nahle.

En este acto cargado de simbolismo, saludaron a los cuatro vientos y a los elementos, entregándole el bastón de mando, un gesto que simboliza confianza, liderazgo y compromiso con las comunidades.

Cuando la Gobernadora tuvo la oportunidad de empezar su discurso, comenzó agradeciendo al expresidente, Andrés Manuel López Obrador, ovacionándolo como un gran líder. Posteriormente dirigió palabras alentadoras a las mujeres veracruzanas:

"A nuestras abuelas, madres e hijas, quiero decirles que sí se puede. Que ahora es posible ser lo que queramos ser. Por primera vez, una mujer llega al Gobierno del Estado". Un gran bullicio de aplausos sonó.

Durante su intervención, Nahle expuso sus compromisos basados en ocho ejes de trabajo: bienestar social, salud, economía, educación, infraestructura, recursos humanos, campo, turismo y seguridad. Cada uno de estos puntos fue recibido con vítores por parte de aquellos que llegaron de diferentes municipios del Estado, trabajadores integrantes de sindicatos, familias y personas que llegaron en grupos.


Cuando terminó el discurso, los aplausos continuaron, y se vio una rápida dispersión de los asistentes, muchos de ellos esperando indicaciones para regresar a sus municipios y comunidades, algunos otros más organizados, tenían hieleras con comida y bebida que degustaron en las jardineras del Parque Juárez.





Este fue el momento para platicar con algunos presentes, una señora proveniente de Mata Clara expresó su esperanza: “Se ve que sí tiene ganas, queremos un cambio”.


Desde Tezonapan, el integrante de un grupo que llego para apoyar a la Gobernadora comentó: "Es un cambio que se pidió para Veracruz. Nuestro estado estaba muy decaído".

Un joven de Omealca resumió el sentimiento general: “Se escucha muy interesante… solo falta que cumpla”.

Otros asistentes también expusieron sus preocupaciones en una larga placita; un señor que viajó tres horas desde Ayahualulco, alzó la voz: “lo único que yo quisiera decirle a la gobernadora, nuestro pueblo está muy abandonado, que vea por nuestros pueblos, siempre nos engañan con lo mismo…”[…] “gracias al señor Manuel López Obrador, que él nos ha apoyado en salud, porque nosotros la verdad allá no tenemos hospital, no tenemos nada, tenemos que correr hasta Teocelo o hasta Coatepec para que nos puedan atender, que bueno que ganó y esperemos que nos siga apoyando a los viejitos”.

Durante el dialogo que se mantuvo con el señor, se le notaba nervioso, […] “yo vengo con un grupo, este señor se quiere aventar para presidente de Ayahualulco y lo vamos a apoyar, me da mucho gusto que ella haya ganado, esperemos que ojalá y si trabaje” expresó, durante la entrevista, un par de personas se acercaban disimuladamente a escuchar las palabras del señor.

Así como el caso del señor entrevistado, podría haber más, en los cuales los políticos interesados en tener un puesto, como en este caso, municipal, ven de estos actos protocolarios, una gran oportunidad para acercar a las personas y que parezca que son fieles partidistas, en otros casos, podrían ser compensados económicamente por asistir en grupos, otro ejemplo son los trabajadores sindicalistas, quienes tienen que estar del lado del partido que gobierne en la actualidad.

Esta es una nueva etapa que promete transformación, pero que aún debe probarse con hechos...

Por: Mélika Martínez & Adrian Hernandez