COLUMNA “EL JUEGO PROFUNDO”
Por
Jorge Negroe
En esta columna sí hablaré de una final del futbol mexicano, pero no la de la Liga Mx, si no de una realmente histórica, me refiero a la que jugará el Club Pachuca contra el Real Madrid en la Copa Intercontinental de la FIFA, pues será la primera vez que un equipo de la Confederación Norte, Centroamericana y del Caribe de Futbol (CONCACAF) llegue a estas instancias.
Realizándose en Qatar, el
camino de los “tuzos” del Pachuca en esta competición (antes conocida
como el Mundial de Clubes) fue primero la de clasificar a la misma al
campeonar en la Concachampions, máximo torneo de la confederación a la
que México pertenece, derrotando al Columbus Crew de Estados Unidos y embolsándose
5 millones de dólares en el acto.
Después, al arribar a
tierras qataríes, venció al Botafogo de Brasil, campeón de la Copa
Libertadores, para continuar echando en tanda de penales al equipo egipcio Al
Ahly, campeón de África, que venía de eliminar al representante de Asia, Al
Ain. Pasando a una final contra el monarca de Europa el Real Madrid
de España.
Y es que Pachuca no
sólo está motivado por el prestigio de jugar contra un equipo europeo este
próximo miércoles 18 de diciembre (una visión eurocéntrica que impera en
nuestra realidad actual) ni por representar a México, si no porque ya obtuvo otros
5 millones de dólares sólo por llegar a este partido, además de que si gana, no
sólo se convertiría en el club de la CONCACAF con más logros deportivos, si no
en uno de los pocos en haberle ganado al equipo español, cuyas estrellas lo
mantienen en la elite mundial… eso y recibir junto a la Copa otros 5 millones
de dólares más… me refiero a más de 200 millones de pesos en total.
Aunque si hablara
técnicamente, el Club Pachuca ya es el equipo con más logros internacionales
de la CONCACAF pues es el único en el mundo que tiene un título oficial de la
FIFA fuera de su confederación, el cual obtuvo en el 2006 cuando se impuso al Colo
Colo de Chile en la Copa Sudamericana, torneo organizado por la Confederación
Sudamericana de Fútbol (CONMEBOL).
En México, la imagen del Club
Pachuca siempre ha sido la de un equipo pionero en el futbol, el cual ha
sido modesto, obteniendo sus grandes logros con trabajo y mucha entrega, aunque
a esta fórmula se le debe agregar la del capital que lo sostiene, pues de
sencillo no tiene nada, ya que pertenece al Grupo Pachuca, corporativo enfocado
en el giro académico-deportivo y comercial, que cuenta con la Universidad del
Futbol, el Museo del Futbol, así como el Club León y los Coyotes de
Tlaxcala en México, el Club Everton de Chile, el Atlético Atenas
de San Carlos en la Segunda División de Uruguay y el Real Oviedo de
la Segunda División de España.
Esta multipropiedad del
Grupo Pachuca ha sido un arma de doble filo para ellos, pues por un lado les ha
dado peso dentro de la grilla que se da en la junta de dueños de la Liga Mx,
pero por el otro, les ha traído críticas y amonestaciones de parte tanto de los
medios afines a las televisoras (mismas que en su momento también tuvieron
multipropiedades) como de la misma FIFA, y tal como lo comentaba yo en una
columna pasada, incluso les valió la posibilidad de ser eliminados del actual
“Mundial de Clubes 2025” que se realizará en Estados Unidos.
Pero los arreglos entre
dueños calmaron las mareas internas del futbol mexicano y los reclamos se
extinguieron, permitiendo la futura participación íntegra del Club Pachuca y el
Club León (hermanos de corporativo), en compañía del Monterrey en este nuevo “torneo-invento
mercadotécnico de la FIFA”, donde se enfrentarán dentro de sus grupos a equipos
como el Flamengo de Brasil, el River Plate de Argentina, el Chelsea
de Inglaterra, el Inter de Milán italiano y en el caso específico de los
tuzos, nuevamente al Real Madrid, pero ahora sí, sólo por la gloria de
pasar a la siguiente ronda.
Y es que, la FIFA quiere emular
a su edición de selecciones, realizando el Mundial de Clubes cada cuatro
años con 32 equipos que incluirán a los clubes campeones de sus confederaciones
y algunos invitados “tácticos” (como el Inter de Miami donde juega
Lionel Messi) los cuales solo por asistir supuestamente recibirán 30 millones
de Euros, así como una bolsa de premios que superan los 100 millones de
dólares.
Por lo que la FIFA
necesita financiamiento urgente, pero ahora con la venia de los Estados Unidos,
venderá sus derechos de transmisión a precios exorbitantes, dando preferencia a
los intereses estadounidenses, quienes han tenido éxito en su búsqueda por controlar
poco a poco al último deporte con impacto global que les faltaba, queriendo
aleccionarlo en su colonización cultural.
Así, a raíz del FIFAGATE,
la FIFA se tuvo que reinventar y hoy en día se ha vuelto muy hábil para mover
dinero, lo cual puede verse en la preventa de boletos que están haciendo para
la Copa del Mundo 2026, lógica que explico a continuación:
Resulta que debes
registrarte en su página y luego comprar NFTs (tokens no fungibles que
supuestamente son únicos e irrepetibles) para entrar a un concurso donde se
sortearán derechos de compra para boletos del mundial, y la realidad es que
estos tokens no sirven ni para presumirse… Hablo de que gastar dinero en
comprarle a la FIFA colecciones de estampas digitales al estilo de los que saca
Panini, los cuales no te garantizan entrar a los juegos del mundial… Pero que aún
así se están vendiendo rápidamente a precios ridículos.
Regresando al tema de las
finales, la gente que sigue a los Tigres UANL quizá pensarán que no fue
Pachuca, si no su club regiomontano el que llegó y perdió una final del Mundial
de Clubes frente al Bayern Múnich de Alemania en el 2020, siendo el
primero de la CONCACAF en alcanzar tal logro… y tienen razón, los Tigres
se llevaron cerca de 100 millones de pesos por esa aventura.
Pero ante los antojos
gringos y la avaricia de la FIFA el nombre y formato se cambió este año porque
no era tan redituable como ellos buscaban, y Pachuca, que ha usado el
slogan de ser “el equipo de México”, ahora participa en un torneo que tenía 20
años desaparecido, lo que le permite ser los primeros de la CONCACAF en jugar
la final de un campeonato tan confuso como inútil (salvo para los bolsillos
tuzos)… Pero eso sí, llenando de orgullo a muchos mexicanos que usualmente no
apoyan a este club en sus juegos comunes de la Liga Mx.